¿Le cuesta conciliar el sueño o mantenerlo? Le escuchamos. Millones de personas se enfrentan dificultades para dormir que no puede resolverse contando ovejas. Afortunadamente, los efectos de escuchar música antes de dormir y mientras duermes, ¡no hay que subestimarlas!
Los estudios han demostrado que la mayoría de las personas que escuchan música justo antes de acostarse disfrutan de sueño de mejor calidad. La música relajante disminuye especialmente el ritmo cardíaco y reduce la sensación de estrés y ansiedad. Incluso puede poner fin al tren de pensamientos que te impide dormirte.
Para que el cuerpo y el cerebro sean más receptivos a la música que ayuda a conciliar el sueño, hábitos de sueño saludables son cruciales. El modo en que te comportas justo antes de acostarte, pero también durante el día, puede dificultarte -o facilitarte- la conciliación del sueño. Los expertos recomiendan combinar musicoterapia del sueño con rutinas saludables, incluyendo:
Levantarse a la misma hora todos los días (fines de semana y festivos incluidos).
Intentar dormir al menos siete horas seguidas.
Limitar la exposición a la luz por la noche (esto incluye también las pantallas).
Evitar las bebidas y las comidas copiosas antes de acostarse.
Hacer ejercicio regularmente y mantener una dieta sana.
Se dice que 60-80 pulsaciones por minuto es el tempo ideal para preparar el cuerpo y la mente para el sueño, pero lo que es aún más importante es cómo te hacen sentir ciertas canciones. La música es y siempre será una experiencia personal. Si te gustan los sonidos contemporáneos, no dejes de consultar nuestra lista de reproducción en Spotify llamada "Dormir. Duerme. Es un mundo QX".
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